Cuando la seguridad devora al bienestar

En la última década, los presupuestos de defensa han dejado de ser un asunto discreto de generales y ministros para convertirse en la nueva coartada política. Europa entera se viste de uniforme: fabricar más armas, coordinar mejor las compras, producir drones a destajo… RTVE lo resumía hace unos días en un debate sobre las prioridades estratégicas del sector: inversión, retorno económico y crecimiento industrial. Todo muy serio, muy técnico, con un barniz de inevitabilidad.

El problema es que detrás de esas palabras tan solemnes late un silencio incómodo: ¿qué ocurre con las prioridades de quienes no llevan galones en la pechera, sino mochilas en el colegio o camillas en el hospital? ¿Quién levanta la mano por la inversión en aulas ventiladas, quirófanos decentes o pensiones dignas? Parece que la seguridad de los ciudadanos se mide ahora en blindajes y no en bienestar.

La lógica es conocida: “si no invertimos en defensa, seremos vulnerables”. Pero conviene recordar que un país sin hospitales funcionando, sin escuelas equipadas, sin vivienda accesible, es también un país vulnerable. La diferencia es que esa vulnerabilidad no se dirime en un campo de batalla lejano, sino en la cocina de cada casa.

Hay, además, una paradoja deliciosa —o amarga, según se mire— en este entusiasmo armamentístico: se nos vende como motor económico. Como si la prosperidad de una sociedad debiera medirse por la velocidad con la que produce proyectiles. El mito de la industria armada como salvavidas nacional es viejo: crea empleo, dinamiza regiones, atrae contratos. Pero el mismo dinero, invertido en energías renovables, salud o educación, no solo crea empleo: crea futuro.

La pregunta de fondo es ética, y eso molesta porque la ética nunca cotiza en Bolsa. ¿Queremos que la seguridad de nuestros hijos dependa de la munición almacenada o de la sanidad que los atienda? ¿Queremos gobernantes que presuman de gasto en defensa mientras las listas de espera hospitalarias baten récords?

Al final, invertir en armas no es solo un cálculo presupuestario; es una declaración de intenciones sobre qué entendemos por patria. Si patria es industria militar, drones y tanques, adelante con el desfile. Si patria es ciudadanía, dignidad y derechos, convendría revisar prioridades.

Porque la verdadera seguridad nacional no se mide en tanques, sino en aulas donde se aprende a pensar y hospitales donde se puede sanar. Y esa inversión, curiosamente, nunca la discuten en ferias internacionales ni la televisan con banderas de fondo.

  • Related Posts

    La agresión verbal en la política y las redes sociales: entre el insulto normalizado y sus consecuencias

    Rosa Amor del Olmo La palabra puede ser tan hiriente como un golpe. En la arena política actual y en el vasto mundo de las redes sociales, la agresión verbal se ha vuelto un recurso frecuente y normalizado. Los insultos,…

    La envidia bajo el paraguas de la política

    Rosa Amor del Olmo La envidia es el único vicio que no goza: su placer no está en conseguir nada, sino en ver caer a otro. En la vida pública, ese impulso se disfraza de moralismo vigilante, de celo fiscalizador…

    Deja una respuesta

    Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

    ARTÍCULOS

    Flotillas para Gaza detenidas en octubre de 2025: contextos, actores y reacciones internacionalesIntroducción

    Flotillas para Gaza detenidas en octubre de 2025: contextos, actores y reacciones internacionalesIntroducción

    El papel educativo del cine y la Sociedad de Naciones

    El papel educativo del cine y la Sociedad de Naciones

    La dimensión laboral en la Historia de la arquitectura por Gabriel Pradal

    La dimensión laboral en la Historia de la arquitectura por Gabriel Pradal

    Fernando de los Ríos y el homenaje a Joaquín Costa en la República

    Fernando de los Ríos y el homenaje a Joaquín Costa en la República

    “L’Associació Obrera de Concerts de Pau Casals”

    “L’Associació Obrera de Concerts de Pau Casals”

    El Gobierno recupera los fondos de la Logia Añaza para el Templo Masónico de Tenerife

    El Gobierno recupera los fondos de la Logia Añaza para el Templo Masónico de Tenerife

    España en 1890: noticias destacadas

    España en 1890: noticias destacadas

    Benito Pérez Galdós: pilar del periodismo hispanoamericano

    Benito Pérez Galdós: pilar del periodismo hispanoamericano

    La semilla que prendió: Pablo Iglesias visto por Eduardo Montagut

    La semilla que prendió: Pablo Iglesias visto por Eduardo Montagut

    La lengua gallega: patrimonio cultural en la encrucijada lingüística

    La lengua gallega: patrimonio cultural en la encrucijada lingüística

    La OIT y los trabajadores intelectuales (1926)

    La OIT y los trabajadores intelectuales (1926)